THE WITCHES (for older children)
In the dark forest under the haze
absent the moon’s silvery rays,
when the night is black and still
the witches hold a blackbird’s quill.
They, merrily, jot down names
of naughty children
to beat them with disdain.
Their greenish eyes are frightful,
their ghostly hair quite dreadful.
They boil the bones of forest owls,
of hairy rats and ugly fowl,
in a large caldron as they cackle,
“Abracadabra, dung of a zebra,”
as Apollo rises from the shadows.
They cast their spells with horrid chants.
rousing frogs, toads and bats,
They aim to turn errant children,
into legions of moles and rats.
On guard, child, the witches prowl
and cast the spells I’d hate to see,
and in the morning, as you shower,
if you’re not careful, a toad you’ll be.
LAS BRUJAS (para niños grandes)
Es en el monte bajo la bruma,
donde no hay rastro de clara luna,
en lo más negro de la negrura,
están las brujas con una pluma.
Anotan, locas, los niños malos
para en la noche darles de palos.
Tienen los ojos verdes y raros
y los cabellos grises y ralos.
En una olla cuecen los huesos
de aves nocturnas de feo gesto;
“Abracadabra, barbas de cabra”
cantan las brujas venida el alba.
Encantar piensan a los incautos,
hipnotizando con su feo canto.
Ranas y sapos de niños malos
piensan hacerlos para su daño.
Cuídate, nene, que vienen brujas
a tu camita donde te arrullan
y en la mañana cuando te duchas
Sapo serás, si no me escuchas.